Si alguna vez te has sentido confundido acerca de qué son los triglicéridos y por qué son importantes, no estás solo. Comprender los triglicéridos es trascendental para tu salud, por eso estamos aquí para ayudarte a resolverlo.
¿Qué son los triglicéridos?
Los triglicéridos son un tipo de grasa, de hecho, la más común en el cuerpo. Su trabajo es almacenar las calorías que consumes pero que no usas de inmediato. Las hormonas activan los triglicéridos para liberar la energía que necesitas entre tus meriendas o comidas.
La energía ahorrada es normal y saludable, pero, a diferencia de una cuenta de ahorros, un exceso de grasa guardada te perjudica a largo plazo.
Los triglicéridos se miden fácilmente con un análisis de sangre de rutina. Para un adulto, 150 mg/dL es un nivel normal. Cualquier valor superior a 200 mg/dL puede comenzar a causar problemas graves en el cuerpo si no se toman medidas.
¿Por qué son malos los niveles altos de triglicéridos?
Demasiados triglicéridos en el cuerpo, combinados con niveles de colesterol no saludables, pueden causar enfermedades cardíacas. El cuerpo no puede procesar la grasa correctamente, por lo que el colesterol se acumula en el interior y endurece las paredes de los vasos sanguíneos, lo que puede causar insuficiencia cardíaca.
Los triglicéridos altos también pueden causar aumento de peso, lo que contribuye a las enfermedades cardíacas y a otros problemas, como la diabetes tipo 2.
¿Qué causa un nivel alto de triglicéridos?
La verdad es simple, pero probablemente no te guste escucharla: consumir demasiadas calorías. Peor aún, el exceso de calorías se encuentra con más facilidad en los alimentos que a muchas personas les encantan, como los refrescos, los alimentos procesados, el azúcar y los carbohidratos refinados.
¿Qué puedes hacer para bajar tu nivel de triglicéridos?
El cambio más importante es evitar los azúcares refinados. Eliminar las bebidas azucaradas como los refrescos, las bebidas deportivas e incluso, los jugos te dará una gran ventaja. Los azúcares pueden esconderse en alimentos aparentemente saludables como barras de granola, pan de trigo y salsa para pasta. Revisa las etiquetas cuidadosamente y elige marcas con poca azúcar agregada.
Agrega fibra a tu dieta cada vez que sea posible, porque puede ayudar a reducir tu nivel de triglicéridos. Los cereales integrales, los frijoles y las nueces son excelentes fuentes. Agrégale una manzana picada a tu avena o lentejas a tu próxima sopa.
Prepara y come alimentos frescos tanto como puedas y evita los productos procesados que están en los estantes del supermercado.
Consume pescados grasos como el salmón o las sardinas.
Realiza más ejercicio
Esto puede parecer la recomendación general para todas las dolencias, pero en realidad marca una gran diferencia en la reducción de los triglicéridos.
La parte más importante del ejercicio es ser constante a largo plazo. Los estudios han demostrado que el ejercicio regular con el tiempo puede disminuir drásticamente tus niveles de triglicéridos. El ejercicio sencillo es un buen punto de partida: sal a caminar con un amigo y empieza a bailar salsa para mantenerlos bajo control.
Prueba un suplemento
Las investigaciones muestran que los suplementos con ácidos grasos omega-3, como el aceite de pescado, pueden ayudar a reducir el nivel de triglicéridos. Considera la posibilidad de agregar uno mientras realizas otros cambios saludables.
Los triglicéridos no son tan complicados como parecen. Recuerda que los cambios pequeños pero consistentes realmente pueden reducir su nivel.
Seamos más saludables, juntos.
Tus amigos de Santo Remedio