Saltar contenido
Nueva línea de Mujeres aqui →

Cómo Mejorar Nuestra Concentración y Memoria

Cómo Mejorar Nuestra Concentración y Memoria

Sabemos que el ejercicio físico y el mental, así como la adecuada alimentación son fundamentales para que nuestro cerebro esté saludable y sus conexiones funcionando al máximo potencial posible. Pero hay otros aspectos que la ciencia ha probado que también son muy importantes, como la adecuada oxigenación e incluso, nuestra postura corporal. Hoy te mencionamos algunos de estos, para que también les pongas atención y veas cómo mejorarlos.

Control de la postura física mejora el desempeño de la actividad mental

¿Crees que es exageración? Pues no. Hay diversas investigaciones que muestran que nuestra postura interviene en el desempeño de nuestra mente y su capacidad de concentración en una determinada tarea (1). Por ejemplo, mantener la espalda recta es fundamental para que nuestro cerebro reciba suficiente oxígeno para cumplir todas sus tareas, evitar la depresión, la fatiga y mejorar la concentración. No podemos olvidar que nuestro sistema músculo-esquelético no solo es un armazón que nos mantiene en pie, sino que todo nuestro organismo depende de este y está interconectado. Por eso, cuando te sientas agobiada por el trabajo o estudio, no te derritas sobre la silla tratando de buscar una posición más cómoda. Al contrario, ponte de pie, camina unos minutos, flexiona las piernas, estírate, relaja los músculos, ejercítalos y vuelve a sentarte. En caso de tener una molestia constante, busca la ayuda de un especialista como un quiropráctico. Visitar un experto de este tipo es tan importante como acudir al dentista u oftalmólogo con regularidad.

Respira y verifica que todo tu sistema respiratorio esté en orden

Se ha demostrado ampliamente los efectos positivos que tiene en nuestro comportamiento y capacidad mental el respirar adecuadamente (2). Como mencionamos anteriormente, el oxígeno es el nutriente fundamental de nuestro cerebro. No en vano quienes practican técnicas avanzadas de respiración pueden pasar largos periodos solo a base de oxígeno. La respiración controlada ha mostrado efectos positivos físicos, mentales y psicológicos incluso en personas que han sufrido lesiones traumáticas cerebrales graves (3). Aprender a sacarle provecho a la respiración es una buena herramienta para controlar factores de riesgo como el estrés y la ansiedad. Como también lo es verificar que todo nuestro aparato esté funcionando adecuadamente a nivel pulmonar, bronquial e incluso, en nuestra nariz. Hay personas que padecen de congestión constante, goteo, dolor de cabeza, pérdida de olfato y dificultad para respirar, lo cual puede que esté ocurriendo por pequeños pólipos nasales. Por eso, una revisión con un especialista podría ser el primer gran paso hacia la mejor oxigenación de tu cuerpo y mente.

Controla los factores de riesgo

Mejorar nuestra capacidad de concentración y nuestra memoria también tiene que ver con mantener a raya los factores de riesgo para enfermedades vasculares como son la diabetes, obesidad, presión alta y colesterol alto, ya que el buen estado de tu cerebro y sus funciones también dependen de eso. Sabemos que la diabetes, la hipertensión y otros riesgos pueden deteriorar nuestra memoria, además de aumentar las probabilidades de que suframos un accidente cerebrovascular o demencia (4).

Duerme lo suficiente, ¡como un bebé!

Dormir es una de las mejores inversiones que podemos hacer para nuestro cerebro a corto, mediano y largo plazo. Diversos estudios muestran que mientras descansamos el cerebro se encarga de procesar la información durante el día y que dormir menos de lo que necesitamos va deteriorando este proceso, afectando nuestra concentración, memoria, aprendizaje, estado emocional y comportamiento. De hecho, se ha visto que el buen ciclo de sueño determina el equilibrio en nuestro desempeño mental, emocional y sistémico, pues tiene injerencia directa en la respuesta inmunológica, digestión, proceso hormonal y metabólico, entre otras, todas interrelacionadas (5). Un estudio realizado mostró que la falta de sueño incluso puede afectar la capacidad para captar nuevos recuerdos, como relacionar nombres con rostros (6). ¿Más claro?

No olvides nutrirte con lo básico para las funciones cerebrales:

  • Omega 3: los ácidos grasos que ayudan a mantener sano el tejido cerebral y sus conexiones. Se ha probado que suplementarlos durante 30 días mejora la capacidad mental de las personas y activa el cerebro. (7)

  • Ashwagandha: Como sabes, el manejo del estrés puede ayudar enormemente a tu cerebro para que cumpla sus tareas. Se ha estudiado que tras 8 semanas de uso de ashwagandha además de ayudar a controlarlo, se mejora la memoria y las funciones cognitivas en adultos con deterioro leve. De igual forma puede mejorar la función ejecutiva, la atención y la velocidad con que se maneja la información, precisamente debido a la disminución del estrés que interviene en estos aspectos. (8) 

  • Cúrcuma: Se ha visto que puede detener el deterioro neurológico porque tiene la capacidad de penetrar la barrera hematoencefálica y combatir la inflamación debido a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, entre otros mecanismos de acción. (9)

“Enfócate” en cuidar tu cerebro y mejora la calidad de tu vida, pensando en hoy y en el mañana.

Seamos más saludables, juntos.

Tu equipo Santo Remedio.

Referencias

1. Carissa Wilkes, Rob Kydd, Mark Sagar, Elizabeth Broadbent, Upright posture improves affect and fatigue in people with depressive symptoms, J Behav Ther Exp Psychiatry. 2017 Mar;54:143-149. doi: 10.1016/j.jbtep.2016.07.015. Epub 2016 Jul 30.  

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27494342/

2. Helen Y. Weng, Jarrod A. Lewis-Peacock, Frederick M. Hecht, Melina R. Uncapher, David A. Ziegler, Norman A. S. Farb, Veronica Goldman, Sasha Skinner, Larissa G. Duncan, Maria T. Chao, Adam Gazzaley. Focus on the Breath: Brain Decoding Reveals Internal States of Attention During Meditation, Front Hum Neurosci. 2020; 14: 336. Published online 2020 Aug 28. doi: 10.3389/fnhum.2020.00336, PMCID: PMC7483757, PMID: 33005138

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7483757/

3. Colin Silverthorne, Sat Bir S Khalsa, Robin Gueth, Nicole DeAvilla, Janie Pansini, Respiratory, physical, and psychological benefits of breath-focused yoga for adults with severe traumatic brain injury (TBI): a brief pilot study report, Int J Yoga Therap. 2012;(22):47-51. 

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/23070671/

4. John R. Petrie, MD, PhD, Tomasz J. Guzik, MD, PhD, and Rhian M. Touyz, MD, PhD. Diabetes, Hypertension, and Cardiovascular Disease: Clinical Insights and Vascular Mechanisms, Can J Cardiol. 2018 May; 34(5): 575–584. doi: 10.1016/j.cjca.2017.12.005 PMCID: PMC5953551, PMID: 29459239

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5953551/

5. María Teresa Acosta, Sleep, memory and learning, Medicina (B Aires). 2019;79 Suppl 3:29-32. PMID: 31603840 

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31603840/

6. Leonie Maurer , Kirsi-Marja Zitting, Kieran Elliott, Charles A Czeisler, Joseph M Ronda, Jeanne F Duffy, A new face of sleep: The impact of post-learning sleep on recognition memory for face-name associations. Neurobiol Learn Mem. 2015 Dec;126:31-8.  doi: 10.1016/j.nlm.2015.10.012. Epub 2015 Nov 5. PMID: 26549626 PMCID: PMC4666502 DOI: 10.1016/j.nlm.2015.10.012 . https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26549626/

7. Isabelle Bauer, Matthew Hughes, Renee Rowsell, Robyn Cockerell, Andrew Pipingas, Sheila Crewther, David Crewther, Omega-3 supplementation improves cognition and modifies brain activation in young adults. Hum Psychopharmacol. 2014 Mar;29(2):133-44. doi: 10.1002/hup.2379. PMID: 24470182 DOI: 10.1002/hup.2379

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24470182/

8. Dnyanraj Choudhary, Sauvik Bhattacharyya, Sekhar Bose, Efficacy and Safety of Ashwagandha (Withania somnifera (L.) Dunal) Root Extract in Improving Memory and Cognitive Functions. Randomized Controlled Trial. Suppl. 2017 Nov 2;14(6):599-612. doi: 10.1080/19390211.2017.1284970. Epub 2017 Feb 21. PMID: 28471731 DOI: 10.1080/19390211.2017.1284970

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/28471731/

9. Shrikant Mishra, Kalpana Palanivelu. The effect of curcumin (turmeric) on Alzheimer's disease: An overview. Ann Indian Acad Neurol. 2008 Jan-Mar; 11(1): 13–19. doi: 10.4103/0972-2327.40220. PMCID: PMC2781139. PMID: 19966973

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2781139/

Regresar al blog
Ofertas por tiempo limitado...
{"statementLink":"","footerHtml":"","hideMobile":true,"hideTrigger":true,"disableBgProcess":false,"language":"es","position":"left","leadColor":"#ed600c","triggerColor":"#ed600c","triggerRadius":"50%","triggerPositionX":"left","triggerPositionY":"bottom","triggerIcon":"people","triggerSize":"small","triggerOffsetX":25,"triggerOffsetY":25,"mobile":{"triggerSize":"small","triggerPositionX":"left","triggerPositionY":"bottom","triggerOffsetX":25,"triggerOffsetY":25,"triggerRadius":"50%"}}
true